Entrevista Pecker – Azul Plomo

EL MUNDO Y LA VIDA ME AFLIGEN PERO SIGO BUSCANDO ESA LUMINOSIDAD

Hace mucho tiempo del que no logro acordarme tuve la suerte tanto de entrevistar como de disfrutar a Pecker en directo en el Centro Cultural de Calle Ollerías de Málaga. Allí «Amor de contrabando» se convirtió en una de mis canciones de referencia, y ese sonido se me fue perdiendo en otros derroteros hasta que éste «Azul plomo» que nos presenta en la actualidad me ha reencontrado con su música, y me ha hecho recordar lo necesaria que vuelve a ser en mi vida. Así nos lo cuenta el propio artista.

P: A todos nos ha hecho falta resumir este tiempo tan convulso y tú lo has hecho con esta canción

Pecker: Yo siempre creo que tenemos necesidad de contar nuestras experiencias, pero particularmente en este momento extraño y convulso que vivimos, que va a hacer ahora tres años, yo creo que hay mucha necesidad de expresarse. Para mi fue realmente terapéutico. Yo estaba con pocas ganas de hacer canciones, estaba más centrado en otras disciplinas, estaba escribiendo mucho, empecé a colaborar con periódicos y demás, y de pronto en ese momento de ese parón necesitaba explicar un montón de cosas que estaba sintiendo, y así lo hice. Es terapéutico para mi como autor, el poder expresar todo eso pero es terapéutico también para quién lo recibe. Me pasó con el libro de poemas «Roma» de Manuel Vilas que tiene un proceso de creación, son unos poemas que él escribió a modo de diario mientras estaba en Roma durante unos meses y coincidió justo cuando llegaba el confinamiento duro, cuando se empezaba a oír sobre el virus y demás. Para mi fue muy emocionante leer la experiencia de otros, cómo le pilló a él allí mientras estaba trabajando, en los poemas lo iba reflejando y yo creo que esa experiencia de ver cómo han pasado los demás algo que tú mismo has vivido, es muy saludable.

P: Háblame de cómo aparece Víctor Cabezuelo en «Azul plomo»

Pecker: Víctor estaba grabando todos los teclados y me hacía mucha ilusión que trabajara en los sintetizadores, los pianos, los órganos y demás. Se lo propuse al productor, Ramiro Nieto, y le pareció muy buena idea y hablamos con Víctor. Éramos colegas porque habíamos coincidido en varias ocasiones y ya dijo que si. Durante el proceso de grabación de las canciones, este tema de «Azul plomo» pues se me repetía su voz, la escuchaba mucho sin querer, se lo propuse y enseguida dijo que si. Fue todo maravilloso.

«Azul plomo» – Pecker

P: Al haberme reencontrado con tu música, hice un viaje por tu discografía y cada vez haces un pop más luminoso

Pecker: Te lo agradezco mucho. A uno le cuesta tomar perspectiva de cómo está haciendo las cosas. Está reciente ahora mismo todas las canciones de «Peso pluma» que no sé muy bien todavía qué tipo de evolución ha sufrido mi música con respecto a los discos anteriores, pero que me digas esto me parece maravilloso. Tengo 49 años, y es como que estoy en un momento en que empiezas a darte cuenta de según qué cosas, y quizá sigo manteniendo mi carácter optimista, que el optimista no es más que el realista pero que es capaz de enfrentarse a eso con fuerza, con ganas y con esa visión que todo va a salir bien. Me parece estupendo porque el mundo y la vida me aflige, pero parece ser que sigo buscando esa luminosidad.

P: Y en este disco ha participado tu familia más que nunca

Pecker: Mi hijo tiene ahora 23 y María, mi mujer, ha estado vinculada al proyecto desde el principio porque no solo ha sido fuente de inspiración, que lo ha sido, si no que ha sido también correctora e ideóloga de un montón de procesos y partes que implica este proyecto. Más allá de la parte creativa, también ha estado en la parte de producción, administración y demás. Ahora mi hijo se ha hecho mayor, tiene 23 años, ha estudiado diseño y desarrollo de videojuegos, animación y ahora está estudiando producción musical. Es alguien que ha estado vinculado a todo mi proceso y carrera, todas las partes de esto de hacer música que ha vivido en casa, desde el componer hasta responder a una entrevista, hasta irme a un escenario y hasta grabar o lo que sea. Me hacía muchísima ilusión que él estuviera en este disco como parte creadora. Ha sido muy bonito.

P: Se ha podido conseguir hacer «Peso pluma» gracias a tus seguidores que han aportado en el crowfunding que hiciste

Pecker: Es la segunda vez que me meto en un lio de estos. La primera vez fue una necesidad de hacer las cosas de otra manera con «El incendio perfecto» en 2018, de buscar otros caminos, sobre todo eliminar los intermediarios y quedarme a trabajar directamente mi música con la gente que la iba a escuchar. Que esa gente que deseaba oír mis canciones fuera la que realmente me ayudara a sacar el proyecto adelante, no una discográfica. La experiencia fue muy buena, uno se tira al vacío sin saber si hay una red abajo y de pronto resulta que la había, todo aquello funcionó de maravilla, superamos el objetivo con creces, era un objetivo serio y salió adelante. Fue muy gratificante, sobre todo en ese sentido, en el sentido de ver la respuesta que tenías dudas que existiera. Quise repetir y ahora entiendo la música de esta forma. Creo que es la manera más honesta de hacer canciones, realmente tienes un apoyo y tienes una base de seguidores detrás que les interesa, pues vamos para adelante.

P: Estarás como los locos por esa cita el 1 de febrero en Inverfest que te permitirá presentar los temas en directo

Pecker: Me hace especial ilusión en ese festival porque como tienen una parte que se llama «Inververso» en el que se hacen recitales de poesía, pues habiendo recién publicado mi libro de poemas hemos llegado a un acuerdo con el festival para hacer un evento doble. Habrá un recital de poesía media hora antes del concierto, y a continuación empezaremos el concierto con la banda al completo. Va a ser un concierto muy especial

Los madrileños tendrán la suerte de disfrutar de Pecker en directo dentro del festival Inverfest. Será en la Sala Siroco el 1 de febrero, y como nos ha adelantado el cantante y compositor también tendrá la ocasión de leer alguno de sus poemas de su libro «Un vuelo sin la mecánica adecuada», así que es una ocasión muy especial de sentir sus palabras dentro de todos los lenguajes posibles.

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