CONTAR CON LO QUE PASA

«Barco Pirata» ha vuelto a sorprender. La compañía comandada por Sergio Peris-Mencheta quién lleva también el timón de la dirección de estos «Castelvines y Monteses» vuelve a sorprender y a dejarnos boquiabiertos con un ritmo trepidante en un montaje con el que te dejas llevar rápidamente, no te deja indiferente y vuelve a demostrar que en escena tenemos actores y actrices versátiles y multidisciplinares que pueden levantar un espectáculo tan complejo como éste.

Es una producción de Nuria-Cruz Moreno y Sergio Peris-Mencheta para la Compañía Nacional de Teatro Clásico en coproducción con Barco Pirata Producciones que pone en escena a estos todoterrenos de la cultura teatral que dentro de un musical contemporáneo, heterogéneo y con mucho descaro hablan de esta historia de los amantes de Verona que para nosotros nos es conocida, pero nunca te la habían contado ni mostrado de esta manera.

La escenografía es un personaje más que juega a voluntad de la consecución vertiginosa de acontecimientos que te hacen no perder el hilo, pero a la vez no parar de sucederse estímulos que provocan reacciones de admiración ante lo que se contempla en escena. No es solo por la declamación de los versos, y que da gusto cuando se remarca a intérpretes profesionales que deben vocalizar y hacer un gran trabajo de profundidad de voz para que se entienda completamente todo, si no también por los juegos de voces en las diferentes canciones y un recorrido en equilibrio entre la acción y la comedia, que se agradece por mantenernos en tensión, pero también relajar el momento para seguir enseguida con el desarrollo de la trama.

Los grandes elementos con los que funciona esta pieza es el verso de Lope de Vega, con un punto de vista positivo y lleno de vida, ante una amalgama de acontecimientos donde se remarcan personajes arquetípicos de la idiosincrasia italiana, romper la cuarta pared constantemente y de diferentes formas, mostrar diferentes habilidades que el público no espera y que causan un estupor de estar contemplando algo increíble y la música como gran eje central donde van sucediéndose todas las escenas (y a la que tampoco le falta muchos aspectos que impresionan).

Me he quedado con diferentes momentos de «Castelvines y Monteses» pero los momentos mariachi, que he podido reírme con locura, más una interpretación femenina de un gran clásico italiano que al compactar entre las voces de las actrices me ha emocionado de una manera especial, han sido de los que más se han quedado en mi retina emocional.

Éste es el teatro sincero por el que quiero apostar. El que te deja huella por dentro porque sabes que te encuentras ante una función de alta calidad, donde hay mucho trabajo de ensayo en el que se remarca un trabajo de coordinación que les hace un equipo impresionante y que logran que dos horas y media se te pasen completamente desapercibidas. Abstenerse quienes no se atrevan a mirar un discurso distinto que respeta nuestro pasado y nuestras palabras. Viva el teatro que rompe moldes para transmitir a almas como la mía que buscan estímulos para pensar y disfrutar. He salido con el menester cumplido de divertirme ante tantas adversidades del día a día.

Gracias a este elenco maravilloso:

Aitor Beltrán
Paula Iwasaki
Xoel Fernández
Óscar Martínez-Gil
Andreas Muñoz
Xabi Murua
Natxo Nuñez
Maria Pascual
Gonzalo Ramos
Ignacio Rengel
Jùlia Roch
Cintia Rosado
Almudena Salort

Covers:
Nuria Pérez
Sergio Sanguino

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