LA REPOSTERÍA SIGUE SIENDO UNA CAJA DE SORPRESAS

Portada del libro durante nuestra entrevista. Fotografía de Javi Sánchez.
Portada del libro durante nuestra entrevista. Fotografía de Javi Sánchez.

El camino del éxito no tiene porqué venir simplemente por los medios que casi todo el mundo estima. Más bien, ahí ronda la labor de una fama efímera en la que, al final, el recuerdo se queda más en un olvido. El caso de nuestra entrevistada es un reconocimiento bien diferente. Trabajadora, investigadora y con una naturalidad que la hace ser cercana pero que, a la vez, te tienes que rendir a sus pies por su dedicación y, por saber anticiparse a comunicar lo que podía parecer interesante para el público en materia gastronómica y así ha sido. Aprovechamos su presentación en Málaga de su último libro, «Repostería para ser feliz» para entrevistarla.

P: Respondiste a la petición de muchos de tus seguidores que se sentían culpables por caer en la tentación de la repostería

Alma Obregón: La idea de este libro era ofrecer a toda esa gente que muchas veces no quiere tomar postre porque se siente culpable, porque el médico le haya dicho que se tiene que cuidar o porque están cuidando la línea un poco, que son gente que vive con ese sentimiento de que, incluso, si se toma el postre se sienten mal,  pues quería ofrecerles unos postres que son mucho más saludables de lo habitual con ingredientes diferentes y muy ricos y, sobretodo, enseñar un poco más sobre hábitos de vida saludables, también recetas que se pueden hacer con los niños en casa y recetas fáciles que es al final lo que la gente quiere. La gente quiere recetas saludables, ricas y, sobretodo, fáciles. Que les salga rápido para no tener que estar complicándose porque, al fin y al cabo, llevamos una vida de ir corriendo de un lado para otro y siempre trabajando, entonces al final es unir un poco todo eso para que la gente pueda tomar el postre y sentirse bien.

P: A ti te cambió la vida la llegada de tu hijo, Bruno y lo has reflejado en este libro con recetas también para bebés

Alma Obregón: Desde que nació Bruno ya empecé a informarme un poco sobre lo que podían tomar los bebés a partir de los 6 meses, que es cuando comienzan con la alimentación complementaria y cuando llegó el momento, le dije a mi marido «tengo que hacerle galletas, bizcochos y todo lo que yo hago pero adaptado a bebés». Es decir, sin azúcar, con harinas integrales y usando avena y fruta, sobre todo. Es algo muy bonito porque, al final, estamos acostumbrados a hacerle papillas al bebé pero qué ilusión te puede hacer que se coma unas galletas que has hecho tú o que le hagas su tarta del primer cumpleaños, y que sepas que lo que está tomando es bueno para él. En general, el libro es perfecto para hacer las recetas con niños porque son muy fáciles y creo que, hoy en día, no entran en la cocina y, al final, acaban comiendo lo que sea por ahí. En el momento que están en la cocina y están ayudando, estoy segura que se van a lanzar a siempre comer lo que ellos hayan hecho y a comer de forma más saludable, y no querer tanto los bollos industriales.

P: El libro entonces nos puede servir para tener más información acerca de lo que le damos de comer a los niños y a nosotros mismos

Alma Obregón: Yo defiendo la repostería saludable pero, en general, la repostería casera porque estamos controlando los ingredientes que estamos añadiendo en lo que preparamos y, fácilmente así podemos ver lo que estamos comiendo y lo que no. Sin embargo, cuando comemos algo que viene ya procesado muchas veces estamos comiendo muchísimas cosas de las que no somos conscientes y, eso tenía una idea pero hasta que no ha nacido mi hijo y me he puesto a mirar las etiquetas de todo lo que le iba a dar a él, de repente te das cuenta que hay muchos ingredientes ocultos, de los que no somos conscientes y que cuando hacemos las cosas en casa pues podemos evitar añadirlos o usar alternativas.

Alma Obregón durante nuestra entrevista. Fotografía de Javi Sánchez
Alma Obregón durante nuestra entrevista. Fotografía de Javi Sánchez

P: Estás muy implicada en lo que es la salud familiar, en general, porque animas a tus seguidores a hacer ejercicio con sus hijos o viajar con ellos

Alma Obregón: Desde que nació Bruno me ha cambiado la vida, es lo mejor que me ha pasado en el mundo y quería compartir lo que hacía antes, pero ahora con él. A mí me encanta viajar con él, salir a correr con él, salir a la bici y que venga conmigo, es una forma bonita que los niños, poco a poco, vayan formando parte de esos hábitos saludables que puedan tener sus padres o familiares. Empezar a moverse, primero de una forma pasiva porque ellos van en la sillita o en el cochecito, pero poco a poco seguro que quieren participar.

P: ¿Te estás preparando para el momento «mamá, quiero ser repostero»?

Alma Obregón: Seguro porque es super goloso y super tragón. Cocinillas seguro que lo voy a tener.

P: Muchas veces alternas los ingredientes de recetas tradicionales para hacerlas más saludables, ¿algún purista te ha criticado por ello?

Alma Obregón: He tenido suerte porque la gente va aceptando bastante bien los cambios que voy haciendo y, sobretodo, de cara a este libro he tenido que hacer un montón porque al final de eso se trataba, pero hasta ahora la acogida está siendo muy buena y la gente está toda encantada haciendo un montón de recetas y mandándome las fotos diciéndome que les están yendo muy bien. Así que estoy muy tranquila de momento.

P: En tus programas siempre mencionas algo de historia sobre los postres que preparas, ¿es algo que creías que faltaba o es una inquietud tuya?

Alma Obregón: A mí siempre me ha gustado saber lo que hay detrás de las recetas, saber cuando es una receta familiar de dónde viene o saber el origen de una receta tradicional americana. Entonces creo que para la gente es divertido y que les ayuda a entender un poco mejor lo que están preparando. Igual que si alguien que no es español quiere hacer unas torrijas y le quisiéramos explicar cuando se toman en España. Creo que es algo bonito para que la gente entienda mejor todo lo que es el plato en cuestión.

Alma Obregón firmando uno de los ejemplares de su libro. Fotografía de Javi Sánchez
Alma Obregón firmando uno de los ejemplares de su libro. Fotografía de Javi Sánchez

De empezar dando cursos con su sueño de tener su propio negocio de repostería a ya ser una realidad con una bakery en Madrid, «Cookies and dreams», y todo gracias a la mejor voluntad e impulso que le ha podido suceder a Alma Obregón, su hijo Bruno. Él ha sido su inspiración absoluta, a pesar del vértigo y las prisas que supone el conciliar su trabajo y su familia pero como ella dice «requiere mucho trabajo y no pasa nada porque me gusta mucho lo que hago y combino ser madre y ser repostera de la mejor manera posible». Hoy nos presenta este libro tan interesante de «Repostería sana para ser feliz» pero estoy segura que su propias e inquietas musas, nos van a hacer degustar de más platos ricos en el futuro.

Si queréis escuchar la entrevista con Alma Obregón, sólo tenéis que pinchar este enlace:

http://www.ivoox.com/entrevista-alma-obregon-reposteria-sana-para-ser-audios-mp3_rf_22309708_1.html

¡Compártelo!
Share on Facebook
Facebook
Tweet about this on Twitter
Twitter