Entrevista Cristina López Barrio – Rómpete corazón
SON PERSONAJES QUE SE ENFRENTAN AL PASADO, TRATAN DE SUPERAR EL PRESENTE Y DE MIRAR HACIA EL FUTURO CON CIERTO ANHELO DE CRECER
En su anterior libro «Niebla en Tánger», Cristina López Barrio nos habló de su labor de documentación tan precisa que le sirvió para crear esa historia maravillosa, y en esta ocasión en «Rómpete corazón» ha conseguido hurgar en su propia vivencia para inspirarse a la hora de hablar de la familia protagonista, la abuela Rosa, la madre Blanca y la hija, Aurora. Así nos lo relató en esta entrevista.
P: Has hecho una mezcla de géneros interesante en este libro
Cristina López Barrio: Yo creo que es una novela que es un thriller porque es una novela de intriga y de misterio, tiene una parte de novela negra puesto que es una investigación policial en el caso de la desaparición de dos hermanas de una misma familia con un intervalo de 12 años, la primera desaparición es un caso abierto porque nunca se supo que ocurrió con esta primera niña, y en la segunda desaparición da lugar a una nueva investigación policial que va a tratar porque están conectadas las desapariciones. Son idénticas, podemos decir. Van a tratar, a través del personaje del policía, de investigar qué es lo que ha ocurrido. Pero es cierto que es una novela muy pasional, es una novela en la que los personajes podemos decir que están en carne viva, son unos personajes que se enfrentan a su pasado, tratan de superar el presente y de mirar hacia el futuro con cierta esperanza o con cierto anhelo de crecer en muchos aspectos. Yo creo que es una novela que también habla de ciertas etapas de la vida y cómo pasamos de unas a otras. Y hay dos géneros. Hay el género de la novela negra y también una investigación sobre los cuentos de hadas. Son dos de mis lecturas favoritas. Yo soy desde que era niña y empiezo a leer los cuentos de Grimm, de Andersen u otros de hadas apasionada de este género, y que sigo leyendo porque tengo a una hija y porque, además, yo soy lectora de cuentos, aparte que hay unos cuentos maravillosos que los pueden leer perfectamente los adultos. Entonces la investigación de lo que es el cuento de hadas me lleva a ver que, en realidad, eran cuentos también para adultos. El origen del cuento de hadas que lo investigo a través de un libro que se llama «Psicoanálisis de los cuentos de hadas» de Bruno Bettelheim, un libro maravilloso para el que le interese el tema de los cuentos de hadas y me lleva al origen del cuento de hadas, casi en el mito, en la tradición oral y era una forma de explicar los fenómenos de la naturaleza, de explicar lo que era la propia existencia, las etapas por las que pasa el hombre, de la infancia a la pubertad, de la pubertad a la madurez y de explicar, también, las relaciones con los demás. Es una manera, de alguna forma, de todas esas pasiones, monstruos o malos pensamientos que tenemos dentro y que experimenta también el niño de la infancia, poder encarnarlos en determinados personajes como son los villanos o situaciones muy extremas para poder entender lo que es la vida, para poder entender que si te enfrentas al villano o a determinados miedos y luchas, hay como un restablecimiento del orden. Entonces empiezo a investigar la teoría literaria, las estructuras de novela negra, de detective y de cuento de hadas y encuentro varios puntos en común. Por ejemplo, el cuento de hadas empieza siempre con una desgracia, el príncipe o la princesa siempre tiene una pérdida del padre, de la madre o una huida del hogar, hay una desgracia que le ocurre. En la novela negra empieza siempre también con un suceso que suele ser un asesinato o una desaparición como en este caso. En el cuento de hadas podemos decir que para solucionar esa desgracia que tiene el héroe o la heroína, suele venir de la mano de un personaje que se llama «donante» y que introduce un modo mágico normalmente de poder solucionarlo, aparte de enfrentarse a una serie de pruebas con el villano. Me parece muy interesante que ese modo mágico de solucionar esa desgracia, podía ser en la novela negra toda esa investigación policial y el donante podía ser el inspector de policía, como ese método mágico aquí era pues toda esa investigación basada en la ciencia puesto que hablamos del año 2019, y ese personaje como ese donante que va a intentar solucionar y ayudar al personaje, al héroe o heroína, a que se resuelva esa desgracia o ese suceso en el que se encuentra inmerso. Al final todo cuento de hadas requiere un final feliz, un final en el que haya justicia porque el niño sobre todo lo que entiende es que hay justicia, es decir «te has portado mal y sufres las consecuencias». Un restablecimiento del orden que también se da en la novela negra cuando se resuelve el caso, no siempre hay un final feliz, pero sí podemos decir que hay un restablecimiento de ese orden que ha sido violentado. Entonces hay una estructura muy interesante que parte de «Estudio en escarlata» de la novela de Arthur Conan Doyle de «Sherlock Holmes», en la que ven que hay una estructura que es delito, investigación y resolución del caso, y lo relacionan con desorden, miedo y restablecimiento del orden y la justicia, y entonces esa estructura también estaba dentro del cuento de hadas, y es a lo que yo he ido utilizando para estas dos estructuras clásicas subsanarlas.
P: Menudo proceso de creación
Cristina López Barrio: Esta novela para mi ha sido un reto desde el punto de vista profesional como escritora, una labor de investigación sobre todo dentro de la teoría literaria que a mi me gusta muchísimo, leer sobre teoría literaria y un trabajo de crecimiento como escritor de explorar las formas de contar, de explorar nuevos caminos y de ponerme a mi misma el reto de hacer algo diferente a lo que venía haciendo hasta ahora. Es una forma en la que, podemos decir, no estaba tan cómoda a la hora de contar porque no era un narrador en tercera persona o un omnisciente que siempre parece que te da más facilidad a la hora de contar, si no que ha sido una estructura casi de cubo de Rubik, de puzzle y de ir teniendo muy cuenta, al ser también novela negra, como vas dosificando la intriga, la información que le vas dando al lector y, al mismo tiempo, jugando también con este plano de fantasía, de cuento de hadas que hay en la novela, porque hay un cuento de hadas en la familia Melgar que es la familia donde desaparecen las niñas. Hay un cuento de hadas que se transmite de generación en generación dentro de la familia que está muy relacionado con las desapariciones de tal forma que da la sensación de que ese cuento de hadas se está haciendo realidad, y esto generaba también un ambiente de que algo raro y siniestro está ocurriendo, y uno de los mecanismos que utilizan en teoría literaria, precisamente, es este hecho de que algo fantástico se hace realidad y luego el tema de la repetición que es una herramienta literaria para crear esta sensación de misterio y fatalidad, de que hay un destino del que los personajes no pueden escapar y que es circular. También me venía muy bien para crear lo que era este espíritu de la familia, que son las relaciones familiares. De que hay como un espíritu familiar a lo mejor emparentado con estas constelaciones familiares, y de que los miembros de una familia repiten conductas constantemente y que ahí hay algo, como un secreto, de un inconsciente si no colectivo pues familiar que pesa sobre los personajes y que no son libres para actuar, ni siquiera para sentir si no que están condicionados por la historia de su familia y por su pasado. Yo creo que todo esto le daba a la novela ese halo distinto de misterio, de siniestro y mezclado también con el thriller y de lo que es una pura investigación policial de desapariciones, cadáveres que van surgiendo por el camino y que también jugaba con otro de los elementos de la novela negra que es cuando el misterio, en un principio el caso parece un misterio irresoluble, parece que no hay cabo del que tirar, luego hay muchos falsos sospechosos, se sospecha de muchos personajes y entonces utilizaba también todas estas herramientas de novela negra.
P: Aquí tienes atmósferas y paisajes muy reconocibles para ti
Cristina López Barrio: La atmósfera y el paisaje son un personaje más dentro de la novela. Esta novela surge la idea de hacerla en San Lorenzo de El Escorial, que es el pueblo donde mis padres tienen una casa de vacaciones y donde yo he pasado pues todas mis vacaciones de mi infancia y de mi juventud. El caserón es una de las casas que hay en el barrio de Abantos que se llama en El Escorial, es un pueblo de la sierra de Guadarrama y está en la falda del monte Abantos. Este barrio es un barrio donde las calles serpentean por la falda de la montaña, están ya metidas las casas entre los bosques de pinos, de abetos y entre las piedras de granito. Yo paseaba por allí en bici y en moto cuando era pequeña, y miraba estos caserones que me recuerdan mucho a las casas de los cuentos de Poe, donde parece que las casas tienen vida propia o que las casas son como guardianas de la historia de la familia, es un personaje más y entonces cuando llega el momento de situar esta historia estaba unido. Utilicé San Lorenzo de El Escorial porque era el lugar idóneo porque todo lo que había vivido allí, por las casas que te estoy contando que había visto desde que era pequeña, y luego porque es un pueblo que está lleno de leyendas y yo crecí escuchándolas, como esta leyenda que dice que el monasterio está construido sobre una de las puertas, de las siete bocas que hay del infierno, por orden de Felipe II, entonces reza la leyenda que cuando Lucifer cae del cielo, antes de descender al infierno definitivamente pasa una temporada en una cueva en la falda del mone Abantos. Por eso en mi novela hay un jardín, y en el jardín hay unos túneles misteriosos que dicen que van a dar a unas minas de hierro porque cuenta también la leyenda, que si sigues esos túneles va a desembocar en una de las bocas del infierno.
P: Tu literatura sigue teniendo mucha fuerza femenina, aunque también hay personajes masculinos
Cristina López Barrio: Los personajes masculinos son fundamentales. Es una novela de seis personajes en primera persona, tres hombres y tres mujeres. Pero es verdad que la historia familiar es la historia de las mujeres Melgar, volvemos otra vez a un matriarcado, podríamos decir que volvemos a una saga de mujeres con este cuento que se transmite de unas a otras, también con una locura congénita por la rama femenina y vuelve otra vez a explorar el mundo de una mujer como es el mundo de Blanca, que es la madre de las niñas desaparecidas, y el mundo de una adolescente que es su hija Aurora. El personaje del policía es fundamental porque es el investigador que, de alguna forma, la línea principal de la novela es la investigación de los casos y el personaje de Ricardo, que es la pareja de Blanca, es fundamental también para comprender qué le ocurre a este personaje. Pero vuelvo de nuevo al tema de la mujer, metiéndome en un personaje como es Blanca que ha sido un personaje que he sentido en carne viva y que me he metido en la piel de una mujer que tiene una relación obsesiva o un amor posesivo, una mujer que explora hasta dónde debemos aguantar en una relación, cuáles son los límites del amor. Y si se traspasan, realmente si eso es amor o ya no lo es. Es un personaje que lo primero que tiene que aceptar es el fracaso de su relación, es el fracaso desde el punto de vista del hombre que ama y tiene que empezar a concienciarse de que hay un maltrato, de que hay un intento absoluto de manipulación y de anulación. Primero hay un aislamiento porque la lleva otra vez a esta casa donde ella no quería volver porque allí desapareció su primera hija, no quiere que trabaje, no quiere que vea de alguna manera a sus amigos y luego hay una desestabilización del personaje, culpabilizaciones, diferencias o hacerla dudar de su propia cordura. Esto hace que el personaje de Blanca tenga algo instintivo dentro de ella que le dice que algo no está bien, que ella no es feliz y que esa relación no funciona. Tiene que afrontar primero que el hombre al que ama, le maltrata y es muy doloroso, ahí es donde también se te rompe el corazón y hay veces que se tiene que romper del todo y sufrirlo todo, tocar fondo para poder seguir adelante. Ese es el proceso de esta mujer de aceptar y de querer ver la realidad de lo que le está ocurriendo. Muchas veces la realidad es tan dolorosa que miramos hacia otro lado. Disculpamos, tratamos de culpabilizarnos a nosotras porque también estamos inducidas de que la culpa la tenemos nosotras, que él tiene que actuar así porque nosotras estamos haciendo algo que no está bien y por eso es esa conducta. Esa manipulación con esa absorción al final lo que produce es una anulación de la persona. Es una relación también de absoluta dependencia emocional por parte de ella. Eso también es una forma del crecimiento personal de alguien que tiene que volver a recuperar su autoestima, que tiene que volver a recuperar su independencia emocional que ha perdido en una relación asbolutamente tóxica, de alguien que está completamente enganchado el uno al otro, y al final lo único que hace es engañarse a uno mismo. Entonces para mi, ¿cómo se viven este tipo de relaciones tóxicas, estas relaciones de absoluta dependencia de uno del otro que te dañan pero que, por otro lado, quieres salir pero por otro lado tienes la sensación que no puedes?. Fue toda una labor de meterte en la piel, consulté con una psicóloga porque me parecía muy interesante meterme realmente en la piel de qué les ocurre a estas mujeres y de cuál es todo ese proceso psicológico de sufrimiento. Entonces, a través de una amiga que es psicóloga y que trata mucho el tema del maltrato psicológico, me ayudó a comprender qué les ocurre a estas mujeres y a meterme dentro de la piel del personaje de Blanca.
P: Volvemos a tener referencias a películas y canciones que te gustan
Cristina López Barrio: Me encanta la música, yo creo que la música te transporta a una emoción de una manera muy directa casi más que la literatura, o a lo mejor cuando en un poema lees un fragmento, pero en la música cuando tú escuchas una canción te produce un estado de ánimo, casi de manera inmediata. A lo mejor también el ver un cuadro. Entonces yo utilizo mucho la música para escribir, escucho muchísimas bandas sonoras sobre todo y aquí escuchaba «El laberinto del fauno» de la película de Guillermo del Toro, la atmósfera porque también es una novela que habla de lo que es un cuento de hadas muy mezclado con la realidad y la fantasía. De alguna manera utilizo la fantasía para contar una realidad muy cruda que es lo que también yo hago en «Rómpete corazón», porque aquí hay una realidad muy cruda. Como es una historia de maltrato y también como es una historia de unas desapariciones infantiles que yo creo que es un tema para mi como madre, pues me toca y me hiere mucho la sensibilidad, y no quería tocarlo de una manera cruda, está tocado desde el punto de vista de la inquietud mía y de la preocupación que siempre tienes como madre de que le ocurra algo, y de tratar de entender también porque hay un psicópata dentro de la novela, investigué y vi una serie de Netflix terrible de asesinos en serie americanos para tratar de entender bien todo, meterte dentro de la piel de un personaje de este estilo y averiguar que son personas que tienen cero empatía, que son absolutamente impermeables y que no les afecta el sufrimiento de las otras personas, son incapaces de empatizar y son personas que se ponen la máscara, que tienen una serie de obsesiones y que en el momento en que se frustra lo que ellos desean, reaccionan con ira, con violencia y con rabia. Entonces también el meterme en este personaje fue como muy catártico. Luego para mi el cine que es también como que forma parte de mi vida, entonces yo creo que cada vez está más interconectado en la literatura, nos influye también mucho el audiovisual, el cine por lo menos a mi que me encanta. Nos influyen también las series de televisión que son películas fantásticas, entonces leí un libro que se llama «El mundo, un escenario» que también esta novela bebe mucho de una tragedia, es una tragedia como una tragedia griega o como «Hamlet» de Shakespeare, para mi es una fuente este escritor de inspiración constante, y en este libro que encuentro relaciona el teatro isabelino, las obras de teatro de Shakespeare, con las series de televisión más actuales como «Juego de Tronos»o «House of Cards», y te habla de todas las herramientas que las series de televisión cogen del teatro de Shakespeare como es entrar directamente en el conflicto, no hay un preámbulo si no que el espectador o en la obra de teatro o lo que le ocurre en mi novela que yo lo utilicé, cuando empieza la novela digamos lo terrible ya ha ocurrido y entonces entras directamente en el corazón del conflicto, los personajes ya están en carne viva, ya está el conflicto ahí presente, entonces esta fusión de utilizar elementos de guión y elementos del teatro, y como esta fusión, este mestizaje, de ver cómo se interrelacionan dentro de lo que es la propia narrativa con elementos de guión, también mucho diálogo rápido, los capítulos son bastante rápidos, casi parece que tiene una narrativa un poco cinematográfica, de pasar de uno a otro, la rapidez sobre todo al final, la brevedad lo que hace es que haya una aceleración cómo está buscada la mujer en una película para llegar en un ascenso, in crecendo, hasta llegar al clímax, pues cine y música siempre muy relacionado.
P: Tiene pinta de serie de hecho
Cristina López Barrio: A mi me encantaría el que pudiera llegar a hacerse una miniserie o una película porque me encanta el mundo audiovisual. Es verdad que es otro lenguaje. En la novela siempre cambia, pero poder ver a mis personajes encarnados en actores es muy interesante también porque yo creo que, cuando escribimos y cuando tienes que meterte en la piel de esos personajes, hay mucho de cómo un actor se mete en el personaje que va a interpretar. Yo soy amante del teatro y cuando era muy joven quería ser actriz, entonces estudié teatro, estudié el método Stanislavski, y entonces se utiliza y hay muchos teóricos de guión que lo hablan también, de cómo el escritor debe ser como el actor, es decir, debe de meterse en la piel y debe de sentir que es el personaje y de hacerlo vivir.
«Rómpete corazón» es un verso de «Hamlet», y no es casualidad que de título a este libro porque resume esos thriller familiares, aunque en este caso con un matiz más fantasioso, en unos escenarios muy reconocibles y que les va a apetecer ir descubriendo más aspectos de esta historia para ir encajando todas las piezas. Nos encanta hablar con Cristina López Barrio de esos procesos que siempre emprende en sus próximos proyectos, esperaremos con ganas el siguiente.
Y si queréis escuchar la entrevista con Cristina López Barrio, sólo tenéis que pinchar en este enlace:
https://www.ivoox.com/entrevista-cristina-lopez-barrio-rompete-corazon-audios-mp3_rf_45399687_1.html
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