Entrevista Juan Zelada – Gira con Julián Maeso, Adrián Costa y Alberto Anaut

ESTOS CONCIERTOS ESTÁN SIENDO PEQUEÑAS ISLAS DE ILUSIÓN

El show debe continuar y muchos artistas buscan las mejores fórmulas para que esto pueda seguir sucediendo. En esta idea se han unido Julián Maeso, Adrián Costa, Alberto Anaut y Juan Zelada con el que hemos conseguido hablar en esta entrevista, para que nos hable de la gira conjunta donde van a pasar el próximo 17 de octubre por el Festival SoulShake en el Escenario Santander y el 18 de octubre en el Winter Indie City de la Sala La Cárcel en Segovia.

P: Te has unido con amigos a los que admiras para poder seguir tocando en diferentes espacios

Juan Zelada: Me pilló en plena pandemia donde yo estaba en Cercedilla en la sierra de Madrid, donde también había grabado con mi banda. Es una casa familiar que es una maravilla porque estás aislado de toda la locura de alrededor. Ahí hacía los streamings con mi padre que toca la guitarra muy bien e hicimos las primeras 20 noches consecutivas, y cada vez nos iban surgiendo canciones. En una de esas, me llamó Julián Maeso y él estaba como en su huerto planteándose la vida ya como agricultor, porque el futuro era tan oscuro para el mundo de la música en muchos aspectos, y pues como no puede hacer otra cosa porque es un culo inquieto propuso esta idea maravillosa. Al principio nos juntamos Alberto, Julián y yo, miramos unos temas en su casa en Toledo, y a raíz de eso empezamos a tocar por Galicia mucho, y ahí se unió al proyecto, Adrián Costa, que es un jefazo también de Santiago de Compostela. Los cuatro enseguida ya nos conocíamos, pero lo que ha sido convivir, tirar kilómetros, hoteles y escenarios ha sido complicidad absoluta. De la idea original hace meses de Julián a verlo luego en los escenarios, y ver cómo funciona y cómo está todo de coordinado ha sido, dentro de la que está cayendo, pues una bendición porque no sólo podemos trabajar de manera segura y ofreciendo algo de calidad, si no que encima artísticamente hemos descubierto también como un filón nuevo. Una posibilidad nueva artísticamente, entonces es doblemente satisfactorio por eso.

P: La idea es tocar temas de los cuatro e intercambiaros instrumentos

Juan Zelada: Lo gracioso es que en realidad estamos versionando nuestras propias canciones. Cada uno tenemos nuestros propios proyectos y cada uno funciona, y tiene sus patas y su recorrido. De repente le das otra vuelta de tuerca a cuatro voces, y pones mucho énfasis en las cuatro voces y a unos arreglos en los cuales Julián, pasa de su famoso Hammond Organ a la batería principalmente, Alberto y Adrián irían a la guitarra y voces, y yo además de teclados me meten en el marrón simpáticamente de tocar los bajos. Ahí estoy yo con un reto añadido, de convertirme no sólo en teclista si no también en bajista de la banda. Está siendo versionar nuestros propios temas, y luego sí que lanzamos alguna versión de canciones que la gente pueda reconocer de sorpresa, pero no es el protagonista del repertorio, son más bien nuestras propias canciones y que la gente las descubra de una forma novedosa y con mucho énfasis en lo vocal.

P: Seguro que se nota que vosotros os lo pasáis bien y se lo lográis transmitir a la gente

Juan Zelada: Yo estaba recordando ahora diez días que tuvimos de ensayos en el Naútico de San Vicente do Mar en O Grove en Galicia, gracias a Miguel y a gente del Naútico pudimos estar ensayando lo que es el bar de paso, porque la gente por la pandemia no podía entrar demasiado para pedir sus bebidas, y ahí en la esquina estábamos nosotros en medio de todo el follón de la playa y demás, ensayando en chanclas. Ese era el espíritu, mascarillas y chanclas. Ese está siendo un poco el espíritu del verano, y la verdad es que todo el mundo evitando que pasase nada serio y siendo muy responsable con las mascarillas, las distancias y las manos, pero mientras que estás tocando, te olvidas porque teníamos unas vistas de la playa increíbles, pasándotelo bien con tus amigos. Es esta dualidad de entre la seriedad de la situación de la pandemia, y pasártelo tan bien tocando música, y sacando y descubriendo temas, era una especie de esquizofrenia musical porque quieres ser cauto en algún aspecto, y a la vez quieres disfrutar y pasártelo muy bien. Los conciertos han sido pequeñas islas de ilusión, porque de repente te teletransportas a otro lugar que no sabes muy bien cual es, es un lugar místico y es una maravilla. Lo apreciamos ahora mucho más que nunca.

P: Hay que agradecer que estos espacios hayan querido acoger vuestra iniciativa

Juan Zelada: Gracias a Pepe y algunos ayuntamientos que apuestan por teatros en los cuales cuidan mucho las distancias, los aforos y todo. En realidad son los lugares más seguros de toda una ciudad. Lo comparas con muchos restaurantes, terrazas o sitios públicos que vamos, y yo creo que los teatros es ridículo que hayan cerrado tantos cuando son lugares muy seguros y la gente, el sector como bien sabes, se están preocupando para mantener todos los detalles. Todo muy mirado y con muchísima precaución. Lo veo que todo lo que hemos hecho hasta ahora, tocando madera y todo mi cabeza, lo he visto con una precaución impresionante. Incluso todo el personal que hay detrás de los conciertos que esto es lo que venimos diciendo y haciendo llamamientos, por la gente del sector que trabaja de técnicos, runners, riders y toda la gente detrás de un escenario. Esta siendo todo bastante heroico pero maravilloso a la vez.

P: Esta situación quizás te ha retrotraído a tu etapa musical en Londres

Juan Zelada: Tenía una canción que se llamaba «Forastero» que hablaba un poco de no sentirte muy en tu lugar, en tu casa casi nunca. Yo me sentía forastero allí en Londres, como una persona de fuera que venía, y a la vez ya llevaba tantos años en Inglaterra y volví a España, y me sentía como un guiri más. Ahora mismo estamos todos como forasteros, descubriendo esta situación y adaptándonos como buenamente podemos. Esa inquietud o ese precipicio tiene su cosa artísticamente interesante porque nos pone a prueba, y nos hace como mover ciertas emociones que a lo mejor no conocíamos antes o dábamos por hecho. Y ahora, de repente, ves que a la gente le está llegando o le está emocionando ciertas canciones y demás, y que a falta de no poderse poner de pie, están moviendo las rodillas de una manera diferente, moviendo las manos y demás. Todo es adaptarse a la situación.

P: En su momento lanzabas el EP «Cercedilla Sessions», y ¿ahora cómo lo estás planteando?

Juan Zelada: Yo como muchos otros artistas que conocerás, tuve que cancelar unas quince fechas que tenía de gira para ese EP de «Cercedilla Sessions», y de hecho la presentación iba a ser el 20 de Marzo que fíjate la de tiempo que ha pasado, y la tuve que cancelar. Para reactivar toda esa grabación y ese proyecto que tenía en mente con mi banda, pues lo que voy a hacer es volver a los estudios, y voy a grabar en noviembre unas canciones más y así reactivo de nuevo ese proyecto que tuvo un poco ese «coitus interruptus». Lo reactivo con canciones nuevas y con muchas ganas de volver a tocar con mi banda, por supuesto. Pero ahora como estoy un poco instalado indefinidamente por Galicia, pues se vendrán para Galicia a grabar.

P: Ojalá os salgan más fechas

Juan Zelada: Yo lo recomiendo muy intensamente porque las cuatro personalidades juntas somos una coctelera musical muy interesante, y siempre tenemos gente en el público que a lo mejor conoce a uno de los cuatro, pero de repente descubrir a uno o dos de nosotros, es como que le da un complemente muy interesante, la gente nos está descubriendo gracias a conocer a uno de nosotros, y esto está generando una combinación explosiva pero muy bonita.

Aquí hay muchas islas de ilusión de la mano de Soul Matter Company que son los artífices de que esta idea se haya convertido en realidad. Estaremos pendientes también a la evolución de Juan Zelada con sus «Cercedilla Sessions» que le permitirá seguir sacando letras y canciones que formen parte de nuestra banda sonora. Y que con mascarilla y chanclas sigamos disfrutando de conciertos y de la cultura segura.