ES UNA PROPUESTA QUE INTENTA DESDE EL ABSURDO, EL SURREALISMO Y LA COMEDIA NEGRA ALCANZAR EL MUNDO POÉTICO CON EL QUE TRABAJA «TEATRO A LA PLANCHA»

Selu Nieto y Samuel, el cuarto personaje de "La última boqueá". Fotografía de Tamsimple.
Selu Nieto y Samuel, el cuarto personaje de «La última boqueá». Fotografía de Tamsimple.

Nos encantó descubrir el trabajo tan poético pero que habla de realidades tan palpables en «Los Perros» que nos ha entusiasmado saber que la compañía «Teatro a la plancha», nos iba a presentar su último espectáculo «La última boqueá» esta noche en el Centro Cultural María Victoria Atencia de Málaga. Y nuevamente, Selu Nieto, María Díaz y Pablo Gómez Pando nos sacan un hueco entre preparativos para contarnos qué es lo que van a poder disfrutar los espectadores en esta ocasión. Y le damos las gracias a Samuel por ser también un protagonista con menos capacidad de palabra pero con una presencia imponente.

P: ¿Qué nos vamos a poder encontrar en esta ocasión en «La última boqueá»?

Selu Nieto: Es un espectáculo totalmente diferente a «Los Perros», no tiene nada que ver y sí tiene que ver en el lenguaje que nosotros usamos, pero a nivel de estructura y de lenguaje hemos querido irnos al extremo para encontrar, sin embargo, lo mismo pero de otra manera. Contar de otra manera desde nosotros mismos. Lo que se van a encontrar es una propuesta que intenta desde el absurdo, el surrealismo y la comedia negra, alcanzar ese mundo poético que trabaja «Teatro a la plancha». Ese mundo reflexivo con el que podamos conmover a través de ahí.

P: Contamos con vuestros personajes y también Samuel como parte de esa isla, ese bar en el que estáis todos en escena

Selu Nieto: Nos vamos a encontrar a «La Canija», a «El lindo» y a «El lorito». Todos estos habitantes de la isla tienen alguna relación con Samuel. Mi personaje es «El lindo» y en mi caso soy el amigo íntimo de Samuel, que está aquí en el bar de esta isla celebrando el velatorio de Samuel que ha fallecido.

María Díaz: «La Canija» ha sido su pareja y amante, y se niega a dar el paso de enterrar a Samuel y quiere permanecer con él o lo que queda de él en esta isla para siempre.

Pablo Gómez Pando: Yo estoy recién llegado y muy agradecido a la compañía por acogerme, por estar y por darme tanto. Interpreto a «El Lorito» que yo creo que ocupa el lugar de hijo de Samuel, tanto a nivel material como a nivel más simbólico, porque creo que lo que proyecta en él es como un padre espiritual.

P: Por tanto intuyo que queréis reflejar esas fases diferentes por las que las personas pasamos por el duelo y qué mejor sitio para ello que un lugar de reunión y dónde uno más se puede relajar como es un bar

Selu Nieto: Queríamos jugar con lo dionisíaco y lo apolíneo. Era un poco buscar en el fondo de la tragedia, de la desinhibición, de lo sexual, de lo desaforado y de lo embriagado de lo dionisíaco y por el contrario, lo calmado y lo onírico de lo apolíneo. En este caso, pensamos que la mejor metáfora que para hablar de lo que queríamos hablar era una isla y un bar.

María Díaz: Yo creo que en un bar al final encuentras las herramientas que te ayuda un poco a evadirte de esa soledad y, en este caso, es el alcohol. Lo que rodea a este mundo y a estos personajes que beben un poco para evadirse de la realidad que no quieren ver.

Pablo Gómez Pando: Es como una soledad y una pérdida compartida. Estos personajes yo creo que están acompañados pero perdidos igualmente. Y creo que es muy bonito eso que se logra con el espectáculo, porque yo he tenido la oportunidad de verlo desde fuera y, de repente, reconozco ese bar en bares en los que yo he estado, reconozco a esas personas y reconozco esa pérdida y esa soledad. Esa pérdida de norte y ese sinsentido de la vida o esa búsqueda de sentido y esa búsqueda de la felicidad.

Pablo Gómez Pando y María Díaz. Fotografía de Tamsimple.
Pablo Gómez Pando y María Díaz. Fotografía de Tamsimple.

P: Es complicado aportar todos estos elementos ayudándose de la comicidad, pero en definitiva también nos identificamos más todos de esa manera

Selu Nieto: Yo te puedo contar lo que son estos personajes a nivel dramático y de trama y de historia, pero realmente simbolizan y confrontan a cada espectador con algo diferente, y con una parte suya que es con la que se van a ver reflejados realmente. Yo creo que los tres personajes son cualquier momento que tú has podido vivir o es lo que pretendemos, como que cada espectador pueda identificarse en cierta manera, no con el personaje que es lo que pasa normalmente, sino directamente proyectarse con él mismo. Que digan «ese soy yo en este momento de mi vida».

María Díaz: A nivel temporal, por ejemplo, también muchas veces hablamos de lo simbólico que tiene cada personaje. «El lorito», en este caso, es el futuro, anhelar un futuro y un cambio del presente que no nos gusta, «El lindo» sería el presente, siempre repite la frase de «hay que vivir este momento» y «La Canija» sería el pasado, es un personaje totalmente anclado a algo de lo que no se quiere separar. Yo creo que eso facilita también al espectador porque se identifica con muchos aspectos de cada personaje.

P: En ese sentido seguís la línea contemporánea actual de querer que el espectador se deje llevar, pero no le dejáis al libre albedrío sino que le presentáis vuestra propuesta poética pero identificable en esos comportamientos del personaje

Pablo Gómez Pando: En mi opinión yo creo que plantea preguntas, que para mí es lo más interesante del teatro. Yo como espectador quiero, de repente, verme asaltado por preguntas que son de difícil respuesta y que me toquen y sopesar esas preguntas porque son las que te acompañan toda tu vida o las que yo creo que me van a acompañar toda mi vida. Yo creo que lo hacemos y creo que con un lenguaje y una manera muy personal, que creo que engrandece mucho la propuesta porque me parece muy personal.

P: ¿Qué deducimos del título, «La última boqueá»?

Selu Nieto: La verdad es que todavía no sé muy bien que es la última boqueá con respecto al espectáculo, la verdad. No lo sé. No lo tengo muy claro. No por dejar el misterio sino porque me lo pregunto todavía, realmente. Para ellos, ¿qué es la última boqueá?. ¿El último aliento de vida, el último aliento antes de cambiar su vida o lo último que dieron antes de estar dónde están?. No lo tengo muy claro.

María Díaz: O el primer aliento que pueden dar antes de la nueva vida. No sé, hay muchas maneras de interpretarlo.

P: ¿Cómo ha sido el proceso de ensayos?

Selu Nieto: El proceso de ensayos fue de un año y medio. Ha sido muy particular y cuenta mucho del espectáculo, y el espectáculo cuenta mucho de la compañía y de la situación de la compañía. No podemos despegar una cosa de la otra. Todo está inmerso ahí. Yo creo que al final estamos hablando también de nosotros. En el proceso había un cuarto personaje que era un actor, amigo nuestro, que se llama Samuel que no pudo continuar en el proyecto porque le era inviable por fechas suyas de trabajo y en honor a él, cambiamos todo el espectáculo y toda la concepción dramática en la que él era el que movía y accionaba el mundo de la obra, era el protagonista y tuvimos que cambiar todo y asumir que eramos tres personajes, los antagonistas que era protagonistas, tuvimos que añadir a un nuevo protagonista que estaba muerto y nos pareció bonito llamarle Samuel en homenaje a nuestro compañero, y por eso se llama Samuel.

María Díaz: Al final nosotros en todos los procesos de ensayos nos vamos adaptando a todas las circunstancias, intentando siempre que la obra sea el núcleo de todo lo que está pasando y priorizarlo en la obra. Los ensayos y la obra no los podemos desligar de nuestras vidas, son historias creadas desde la cabeza de Selu pero puestas en pie con el alma de todos, y al final es algo tan nuestro que el vínculo es muy cercano.

Pablo Gómez Pando: Yo lo he vivido como un proceso igualmente de creación. No he llegado y me he tenido que meter en un traje de tales medidas, se ha adaptado también la obra a mí, cosa que agradezco muchísimo. Creo que es por la propia manera de trabajar que tiene la compañía que me parece muy interesante de destacar. Crean la obra de la nada y no es como otra compañía que coge un texto y lo montan. Ellos crean el texto y lo crean todo desde la nada. Entonces creo que el proceso es muy interesante.

P: ¿Cómo está la compañía?

Selu Nieto: Le están viniendo cosas muy bonitas pero creo que toda compañía, tal como están hoy las cosas, tienen la sensación de estar dando la última boqueá. Cualquier compañía de teatro porque es muy complicado. Hoy hemos tenido la suerte de estar aquí y que nos acompañe un público maravilloso llenísimo, pero también nos toca enfrentarnos a otros fines de semana y es la época que hay, la que estamos viviendo y tenemos qué preguntarnos porqué pasa esto y porqué el teatro no suscita el interés del espectador. Y porqué no podemos estar disfrutando de lo bonito que nos está pasando, sino tener la sensación de ahogo siempre y de que nos queda poco tiempo. Sin embargo, hay ochenta mil proyectos en nuestra cabeza porque esto no es la última boqueá. Pero es muy complicado hacer teatro por lo menos una compañía de creación, no lo tiene fácil. Hay gente maravillosa que nos apoya como es el caso de hoy y otros sitios más, pero es verdad que yo entiendo que no es fácil, entiendo también que sería más fácil ir a lo seguro. Tener un lenguaje particular es algo que hace que la carrera no sea de velocidad sino de fondo, pero es la marcha que hemos escogido. Sí es verdad que es el peso pero a la vez es el alivio, porque sino tuviera esto, no sería feliz, eso también te lo digo. Nosotros también sentimos mucho el apoyo, no tenemos ninguna subvención ni tampoco las pedimos, pero tenemos el apoyo de la profesión y el trabajo es reconocido. No es una queja en ese sentido, sino que es verdad que cuesta arrancar y que es más complicado que un espectador no vaya a ver un «Romeo y Julieta» que es más conocido que «La última boqueá». Nos encontramos en esa situación de dar la última boqueá pero nos sentimos más vivos que nunca, a punto de morir, pero más vivos que nunca.

María Díaz: Justo ayer veníamos en la furgoneta hablando mucho del futuro y de cómo nos veíamos dentro de quince años. Respecto a la compañía decíamos que nos gustaría seguir haciendo lo que hacemos, pero sin renunciar a nuestra manera de hacer, de transmitir y de entender el teatro. Al final esa es la apuesta que nosotros hacemos, tiene un precio a pagar pero, de momento, estamos dispuestos a pagarlo.

El equipo artístico de "La última boqueá" durante nuestra entrevista. Fotografía de Tamsimple.
El equipo artístico de «La última boqueá» durante nuestra entrevista. Fotografía de Tamsimple.

Gente curranta que sigue apostando por su particular universo a la hora de marcar historias escénicas y, donde estamos realmente ansiosos de descubrir cómo han creado esta isla de «La última boqueá» que rebosa tantos sentimientos a transmitir para el público. Seguiremos apostando por su fuerza y su valor como empresa cultural esperando a respirar sin descanso esa última boqueá en todos los proyectos que se propongan.

Si queréis escuchar la entrevista con Selu Nieto, María Díaz y Pablo Gómez sólo tenéis que pinchar en este enlace:

http://www.ivoox.com/entrevista-selu-nieto-maria-diaz-pablo-gomez-audios-mp3_rf_23996194_1.html

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